.


"La obra sólo es obra cuando se convierte en la intimidad abierta de alguien que la escribe y alguien que la lee, el espacio violentamente desplegado por el enfrentamiento mutuo del poder de decir y el poder de oír". Maurice Blanchot

29.12.10

siempre es poco

no voy a terminar de leer los libros que estoy acopiando para las vacaciones ni aunque duplique el tiempo.

21.12.10

josefina

era lindo quedarme a dormir.

me paraba en el banquito,
me colgaba del cajón del aparador,
y te usaba los docientos pintalabios.

no hubo otra abuela en el mundo
que guardara el maquillaje en la cocina.
 
qué año hijo de puta dosmildiez,
te voy a extrañar cuando me pinte.

Taller

El Invernáculo: Taller de Juan Diego Incardona
Este verano vuelve "La Imaginación de lo Común"
Recursos narrativos para la transformación de personajes cotidianos en héroes de aventura y fantasía.
Taller literario coordinado por Juan Diego Incardona.
Para todos los que quieran escribir, sacarle punta al lápiz y dejar los vicios de estilo en la puerta.
Van a leer, a escribir y hacer amigos.

Yo, que no seré Carlos Sacaan, pero anduve por ahí, lo recomiendo.
Consultas: juandiego.incardona@gmail.com
http://diasqueseempujanendesorden.blogspot.com/

14.12.10

dicen que dijo Borges (1899-1986)


"quizá haya enemigos de mis opiniones, pero yo mismo, si espero un rato, puedo ser también enemigo de mis opiniones".

9.12.10

releer

hoy leía algo que me había parecido simple.
cuando releés adivinando el procedimiento te das cuenta.
la simpleza es el artilugio más complicado de reproducir.

6.12.10

la imagen del día

Lucio Mantel dejando de tocar para pedir que "alguien le saque el vasito de plástico al nene que hace ruido". Octavio.



http://www.myspace.com/luciomantel

el encuentro

tiene una perra desde que nació. la vio salir del vientre de su madre, desprenderse hasta caer al suelo, sin ayuda de él, de nadie. desde ese día la perra vive en su patio, mundo entero sin ver la calle, algún otro de su especie. no tiene más de 2 metros x 2, agua a veces, y unos restos de comida. lame las paredes y rasca todo lo que puede, como sabiendo algo más, algo que sólo intuye su instinto. una tarde, de la nada, por la hendija de la puerta el tipo le mete un perro tan en celo como ella. desesperado. después ve la escena atrás del vidrio y por ese instante, que dura diez minutos, se siente Dios.

3.12.10

de a mitades



pares impares
hemisferios opuestos
2, 4, 6 a la izquierda
el amor, los deseos
1, 3, 5 a la derecha
la razón todo el tiempo
contradicciones
enlazamientos
una y otra historia de a mitades
hemisferios
círculos que no se cierran
sueños inconexos
pares opuestos que se tocan
los extremos.

29.11.10



la chica que no hay que copiar,
pero se nos metió en las venas.

la posta


por qué no necesitar más simple
un día sin sobresaltos
una tarde al sol, tirada
una cerveza.

por qué no sentir trascendente
que el gato respire bien
como la pareja de gordos, hoy,
en el parque Centenario.

la vuelta loca enroscada
no me hace más cool, más sabia,
la posta la tiene mi vecino
que se levanta a las 6, y toca el piano.

22.11.10

la imagen del día

Mirtha Legrand, en entrevista a Ingrid Betancourt, diciendo: "contame de las primeras fiestas en la selva. ¿No había árbol de navidad, nada?"

18.11.10

Justo Navarro, cierra el prólogo de "El cuaderno rojo" de Paul Auster, así:

"descubrir el poder del azar es descubrir que somos terriblemente frágiles y vulnerables, que dependemos de la casualidad, que una coincidencia estúpida puede destrozarnos en un segundo. Que una palabra estúpida oída por casualidad también puede fulminarnos. Recordar que las personas son terriblemente frágiles es una obligación moral: Paul Auster dice que es cazador de coincidencias por obligación moral".

17.11.10

otra Leticia Martín. pero esta es física, cuentista, y de las islas Canarias


Leticia Martín Hernández nació en Santa Cruz de La Palma, en 1975. Es física, traductora y cuentista. A su regreso a Canarias, en 2005, después de varios años viviendo primero en Londres, luego en el norte de Holanda y por último en Ginebra, comenzó a escribir cuentos bajo la tutela de Ignacio Ferrando y Juan Carlos Márquez, profesores de la Escuela de Escritores de Madrid. En 2007 obtuvo el primer premio del certamen «Biblioteca Villa de Adeje» con el relato «Soledades», incluido en La ecología de las arañas. Más tarde, en 2008, consiguió el primer premio del concurso «Cuentos del Agua» organizado por la Exposición Internacional de Zaragoza. Jorge Edwards, Javier Tomeo, Lorenzo Silva, Andrés Neuman y Soledad Puértolas fueron miembros del jurado. La ecología de las arañas (Ediciones Idea, 2010)es su primera recopilación de cuentos.

me compré un libro porque estaba al lado de otro que me gusta mucho.

14.11.10

el gato de mi vecino toca el piano

Klimt le pusimos
pero es del vecino
un poco nuestro
de todo el barrio.

Male lo llama
lo carga en brazos
la cara exultante
me arranca una sonrisa.

con qué poco a los 9
se puede ser feliz
con algo que no es
propiedad privada

con las rayitas negras
del lomo hasta la cola
sin raza, sin razón
sin nombre hasta recién

con los bigotes blancos
que sólo ven sus ojos
limpios ojos miel
de mi chiquita enorme

que se sienta en el sofá
lo carga en brazos, dice
ma, escribile algo
al gato del vecino.

13.11.10

paradógicamente, Medea puede alegrarme el día.

ambigüedades

no es que no
me sale romper
arruinar nada
que esté a medias puesto.
puesta parezco mejor
miento quescribo y quepienso.
veintiseismil veces el rock,
ventiluz a mis deshechos.
cabeza en saturación
vino que recorriendo.
no es que no
me guste coger
es que no
quiero quererlo.

5.11.10

Sobre la propaganda política

Me dicen que el Gobierno no puede usar los Medios del Estado para hacer propaganda. Que se muestra una parte, que se embellece una política, y se esconde otra. Y que eso no es correcto.

Lo pienso en serio, le doy vueltas al asunto y me acuerdo de otras épocas. De mí en los rodajes de los ´90, en el emporio del despilfarro neoconservador, buscando palabras atractivas para vender las promos con regalos que eran clavos de las empresas, clavos con brillantina, disfrazados de regalo con moño para que los consumidores gastaran sus buenos pesos creyéndole al falso 2x1. Me acuerdo de los planes de Speedy, armando el combo para que pareciera ahorro lo que era gasto, aumento de tarifas encubierto. Me vienen imágenes como la cámara lenta sobre la leche que era pintura blanca,  los bebés felices que se filmaban usando los pañales de la competencia, y la grasa de los platos que salía tan rápido porque era apenas polvo de café.

Entonces, para no seguir recordando mentiras, puestas en escena cuyo exponente máximo sigue siendo el tipo que gana minas porque se fuma los restos de la nicotina del primer mundo, o la mina que se vuelve Valeria Masa porque toma agua sin gas, busco mis argumentos de por qué sí me gusta estar acá, contando una política, mostrando una cara no tan bonita. Y es que me cansé de que la tele, o la tanda, sean privativas. Propiedad pura y exclusiva de unos pocos que sí pueden mentir.

Uno sabe que la salsa natural de tomate tiene conservantes, y que los productos light no lo son tanto. Para eso sí "la gente" tiene capacidad crítica. Para lo demás no. Para imaginar que en una cooperativa puede haber madera en el piso, clavos tirados, no. Ahí estamos mintiendo, exagerando, mostrando sólo lo que nos conviene. Es verdad, no mostramos la grasa de una mano, el aserrín por el piso de una maderera o los mocos en la nariz de un bebé. Los mostramos como mejor podemos, igual que las empresas, que imprimen en papel más caro las etiquetas de sus productos para poder acercarles la cámara, o que eligen una por una las galletitas que van en el pack final del comercial.

¿Es mentir mostrar el lado lindo de una política? ¿Está mal que queramos exhibir nuestro mejor perfil? Claro que no. Segurísimo que no. La comunicación es puro punto de vista. Es lo que creemos, en lo que confiamos. Yo no quiero un país con una falsa programación televisiva, con un falso juego democrático. Prefiero toda la vida a 6,7,8 diciendo su verdad, y a TN diciendo la suya, que a los paneles del griterío. Porque a la larga los hechos hablan solos, y porque además prefiero analizar después de ver, yo solita, sintetizando lo que me dicen con mis propias herramientas. Prefiero que dejen de masticarnos la comida, de decirnos que “este es el debate” o que tal o cuál es un programa objetivo. Porque esa es la gran mentira que se esconde atrás de cada mensaje. La falsa objetividad de los que traen a una mesa de debate a varios pensadores, dándole el micrófono al que les conviene ya no engaña a nadie.

Las audiencias no somos tan ingenuas. Y no es una novedad lo que estoy diciendo. Desde los años ´80 se viene escuchando este verso. Tan viejo es que algunos de los que lo esgrimían ya pasaron al otro lado de su propio discurso.

Ahora cada vez más “gente” estudia, se forma, va a la escuela. Los tontos culturales no son tantos, los pibes en las escuelas son más. Quienes quieran poner en duda esto pueden hacerlo, pararse y decir lo contrario. No nos asustamos. La realidad, que sí es objetiva a diferencia del discurso, los números que son cantantes y sonantes, están de nuestro lado. Y sí, empecé hablando de mí, y termino diciendo nosotros. No es un problema de número, es un punto de vista ideológico.

salió el sol

4.11.10

cuando no puedo nada, la poesía, como Casas empinando el libro. Miller, petaca que no embriaga, mal menor que no cura las heridas. yo te copio Fabián, mi religión, si tan solo pudiera no copiarte. pero aprieto a Paul Auster en la mochila, y me trago los mocos por la calle. qué pena ser todo lo contrario, que la risa esté instalada por decreto, verme firme en el espejo, decidida, y saber que no soy la del reflejo. pura representación, constructo, puesta en escena sin libreto, un mar de posibilidades que no son, versos que no riman, que no versos.

1.11.10

despedida

lo ves con los ojos
mirándose adentro
perdido en por qué
tendrá que ser así,
lo ves con el saco
abierto en arrugas
los hombros caídos
roja la nariz,
un hilo invisible
a los ojos della
seca rama queda
dejándolo al salir,
lo ves que envejece
segundo a segundo
que se va tras desa
sin poder partir.

firmá esta carta

27.10.10

Igual te quedaste

 
Los héroes no escamotean. No descansan. Néstor Kichner tenía hasta hoy a la mañana 60 años. Es tan difícil decir unas líneas coherentes cuando todavía la conmoción no pasó, cuando seguimos tratando de entender por qué. Y nos cuesta entenderlo porque lo vemos desde el mundo egoísta de cada uno. Porque hay que decirlo sin vueltas. Kirchner supo mirar a nuestro país pensando en hacerlo grande, proponiendo un modelo que trascienda su gobierno, el de su susesora, y hasta su propia vida. Por eso al día siguiente de operarse estaba en un acto y nunca hizo el descanzo suficiente. Porque el objetivo no era cuidarse. Era cuidar a todos los argentinos, pero sobre todo a los que estaban afuera de los planes del modelo anterior.
Puede ser que hablar de héroes en esta época huela a naftalina. Pero díganme entonces cómo se nombra a un tipo que pone en primer lugar su ideal, lo compartamos o no, por sobre su propia salud. Justamente hoy, más que antes, sobrevalorar el bien común es un gesto para aplaudir. Y a los que les parezca grandilocuente los entiendo, no todos nacimos para ver más allá de nuestro propio ombligo.

26.10.10

de, La vida de mi padre, Raymond Carver


"¿Dejaría mi puesto en el salvavidas, es decir, moriría, por alguno de mis amigos? Vacilo, pero otra vez la respuesta nada heroica es no. Ellos tampoco lo harían por mí, y yo no querría que lo hiciesen. Nos entendemos perfectamente es esto, como en muchas otras cosas. En parte somos amigos porque entendemos esto. Nos queremos, pero nos queremos un poco más a nosotros mismos. Volviendo a la foto. Nos estamos sintiendo bien con nosotros mismos y también con otras cosas en nuestras vidas. Nos gusta ser escritores. No hay en el mundo otra cosa que quisiéramos ser, aunque también hemos sido otras cosas en uno u otro momento. De todas maneras, nos agrada enormemente que las cosas hayan resultado de tal manera que podamos estar juntos en Londres. Nos estamos divirtiendo, como lo ven ustedes. Somos amigos. Y se supone que los amigos lo pasan bien cuando se reúnen".

22.10.10

El hilo encerado

Fue así. 
Me descuidé un segundo. 
Dieguito se cayó y se abrió la cabeza. 
Me acuerdo que dije “uy teléfono” y que crucé el patio hasta la cocina. 
Los enanitos tendrían uno y medio, máximo dos, y caminaban como astronautas. 
Greta Silva era la que llamaba. Me saludó y me pidió la tarea.
Habré tardado un minuto en pasarle todo. 
-Buscar los cordones montañosos de Europa y ubicar los picos más altos. 
Cuando iba a cortar sonó otra alarma. 
Un grito que me aflojó los dedos, mandando el teléfono al piso. 
Salí al patio y lo vi. 
                         Granito fuera de foco y en el medio Diego, tirado sobre las baldosas. 
Vero deambulaba sin norte, se agarraba con la mano la cabeza. 
                                                                                            Como si ella se hubiera golpeado.
Era el año 1987. 
Estaba sola y los celulares iban a ser masivos recién para la segunda mitad de los noventa. 
Minimicé el asunto y alcé a mi hermano que no lloraba. 
Vero nos seguía, toda una Magdalena. 
Él se iba quedando dormido, dejaba que le cuelgue la cabeza. 
Le dije que no era nada y lo llevé hasta la canilla del patio. 
Salió un chorro frío y me mojé los dedos. 
Enseguida el agua fue de mi mano a su cabeza. 
Pero atrás del pelo y del barro tibio de la sangre, un hueso blanco, la piel abierta en un tajo. 
Y en seguida un mareo, las rodillas sin fuerza, el lavadero desdibujándose. 
Vero tironeaba mi pollera, me iba diciendo qué hacer. 
Puedo jurar que fue así, que sin hablar me guiaba. 
De nuevo el tubo en la oreja y a discar los números que sabía de memoria. 
No me atendió la vecina de Acevedo, ni mi papá en la oficina, vaya a saber por qué. 
No estaba el tío Gustavo, 
y Diego seguía sangrando. 
Manoteé otra toalla y la puse en la herida. 
Las agujas del reloj de la cocina se frenaron a esa hora. 
Lo vi después. 
Las tres de la tarde quedaron hasta las seis, 
cuando volví del hospital.
Me saqué a Diego del hombro y lo puse boca arriba. 
Busqué la puerta de calle con los ojos, di dos pasos y volví. 
Senté a Vero al lado suyo y le improvisé una almohada. 
No había tiempo de dudar. 
Entré en el pasillo medio oscuro, camino a la vereda. 
A veces sueño que ese corredor es tan largo como el que llevaba a Juana de Arco hasta en infierno. 
Lo vi en una película y me sigue apareciendo. 
Estoy con un hombre, la cara de otro, y de pronto me quedo sola en el momento justo. 
El pasillo es estrecho y oscuro. 
Está lleno de hilos de baba negra que lo vuelven resbaladizo. 
Yo me caigo y me levanto, y me enredo con la pollera que tengo enroscada en la cintura. 
Pero salgo y la luz me pega en los ojos, y no hay nadie a las tres de la tarde en la Tablada.
Corro para el lado de San Martín y me acuerdo de la puerta, y de ellos dos adentro. 
Vuelvo para cerrarla pero no. 
Un auto conocido dobla la esquina y entra por Las Heras. 
Salto a la calle y abro los brazos. 
Un poco pidiendo ayuda, un poco que me pasen por arriba. 
El tipo frena y saca la cabeza. 
Es Pepe, un anarquista que vive en frente de mi casa. 
Serigrafista. 
Le hago una seña con la mano para que espere. 
Sin explicarle entro a mi casa. 
Lo que viene es yo cargando a Diego y Vero siguiéndonos, unos pasos rezagada. 
Pepe que se baja, abre la puerta, y acomoda a Vero en el asiento de atrás. 
Le dice que no llore. 
Es un señor grande, él, canoso, la voz siempre afónica. 
Toda su ropa huele a tonner. 
Yo subo adelante, la remera empapada y la sangre que sigue. 
Entiendo que es grave lo que pasa cuando miro los ojos de mi vecino, que no dice nada y acelera.
En menos de veinte minutos estoy en la guardia del Hospital Santojiani. 
Pepe con Vero en el auto, estacionando. 
Yo con mi hermano a upa, sola.
-“Que pase la mamá con el nene lastimado”.
Entro y conmigo una mesita con ruedas, yodo en una botella, olor a hospital como una ráfaga. 
Detrás, calzándose los guantes, viene el médico de turno. 
-“¿Se siente bien mami?”.
Un sí mudo sale como grito. 
Le contesto con los ojos, ahorrando la energía que me queda. 
El médico empapa una gasa con el líquido marrón y la enfermera asegura las dos piernas de mi hermano. 
Yo sostengo su cara, la herida mirando para arriba. 
Junto las muelas y aprieto con fuerza. 
-“Sería mejor que la mamá espere afuera”, larga el médico, la mirada en mi cara empalideciendo. 
-“Estoy perfectamente bien doctor”, le contesto a punto del desmayo, y elijo adrede esa palabra. 
"De acá no me mueve nadie", me acuerdo que pensé, y me gustó que se confundan. 
La aguja entró por un extremo del cuero cabelludo, de afuera hacia adentro y después al revés. 
Lo más parecido a coser una cartera.
El médico tomó las puntas del hilo encerado y tiró con las dos manos. 
La sangre que sobraba rebalsó, y el primer nudo juntó lo que se había roto. 
Así hasta cinco nuditos, uno al lado del otro, todos en primerísimo primer plano. 
Apto para mayores de trece. 
Radiografía, vendas, dieta en un papel y que no duerma. 
Me dieron todo eso, y a mi hermano remendado. 
Cuando volvíamos me asaltó el terror a la penitencia. 
Hice una lista de las posibles, pero me equivoqué. 
Donde esperaba un mes sin salidas, había una especie de entrega de medallas a los héroes de Vietnam. 
Mi mamá me abrazaba, contaba la hazaña y no dejaba de felicitarme. 
Cayeron algunos vecinos y el resto de mis hermanos. 
Yo sentía las miradas.
Esa fue la primera vez que pensé que una hora no dura sesenta minutos, que depende. 
Y desde ese día me la pasé proyectando sistemas individuales de medición del tiempo.

21.10.10

ayer caminé desde la Plaza de Mayo hasta Callao, con las paradas lindas de las librerías. tanto libro te vuelve chiquitita.

19.10.10

¿por qué las letras? porque nunca me llevé bien con los números.
empezando por el 90.60.90.

17.10.10

la imagen del día

 
que chico es todo
un limón en el árbol
donde trepaba.



16.10.10

15.10.10

cosas que se me tienen que grabar

no casi
no tal vez
no adjetivos
no entonces
no yo misma.

no no
y no a la doble negación
y los puntos suspensivos
y los juegos de palabra.

ojo con los sueños.
ir reprimiendo la poesía.

la imagen del día

un pino casi tan alto como yo, que crecía en una cornisa, sobre la puerta de una casa.

12.10.10

una verdad irrefutable a las 17.35

como son las cosas
qué raro se ordenan
tienen que ver con nosotros
pero ni nos enteramos qué
son lo que elegimos una vez
pero sólo las menos dellas
hice un viaje hace poco
desos que no se olvidan
y la pasé tan bien que a la vuelta
no sabía como ordenarlo
decidí un par de cosas enseguida,
desas que te deciden antes,
no sé cuando ni como pero habían,
empezado sin mí hace tiempo.
y por si una duda me quedaba,
a dos día aparece la que fuera,
moneda de diez céntimos perdida
en el hueco de una alcantarilla,
la amiga costilla a la derecha
la que sabe lo que voy a estar pensando
igual que siempre, pero más,
rompiendo todo desde el orden
aparece regalo inesperado
semáforo verde en la avenida
tan cerca el pasado en esos ojos
espejos que no pueden ocultarnos
como un regazo, una verdad
irrefutable,
inmutable,
inconfundible.

la reencarnación

me corto el pelo
que vuelve incesante
poro por poro, ocupado.

no queda ni un lugar
nunca un solo espacio
debajo de la axila, asfixiada.

y no me deja en paz
nunca estoy tranquila
cuando menos lo espero, aparece.

uno solo alcanza
para arruinarme el día
pelo matón encarnado, morite.

sos tan hijo de puta
que venís a reencarnarte
como si creyeras en eso, maldito.

y sé que vas a seguir
insistiendo sin cansarte
creciendo aun después, de muerta.

10.10.10

arcilla con mocos

se le caen las velitas
y no deja la arcilla,
el brazo por la nariz,
camino del moco.

y tira de ellos para arriba
no pasa nada mi amor
el agua rueda al piso
y nos enchastra.

 hay que verlo
espectáculo que se extingue
posesionándose como profesional
con el cuchillo hace un “aujero”.

y el cúmulo de arcilla sin prometer
hueco al fondo del volcán, hace sentido
lo llena del agua que quedó
y se salpica la cara con gotitas.

Camelo va a sonar siempre
a mañana de domingo con Octavio
los dedos de plastilina y verlo
pensar qué pena el tiempo.



1.10.10

adivinarme entre letras de otro,
buscarme más o menos parecida.
como un olor añejo que una vez pensé.
torcer lo que dice, completarlo corrido,
tratar de que parezca lo que yo.
así voy pisando más fuerte,
hasta que un día me rasgue la remera
y ya no tenga que parecerme a nada
que se haya dicho o se esté.

30.9.10

jugando sin jugar

careta, máscara, antifaz
detrás de la pared no hay mayonesa

la gaseosa no refresca la
vestimos casi nada sobre el cuerpo.

nosotros de este lado nos lamemos
le decimos no a los capellanes
nos reímos de los falsos malhumores
de los éxitos con lata y envoltorio.

nosotros somos muchos, escondidos,
sin miedo a que descubran nuestras plantas
largamos el aire en otras caras
tenemos otro ritmo en las pisadas.


miramos sin mover el cristalino
no nos asomamos desde atrás
vamos en bondi hacia los trenes,
jugamos la escondida sin jugar.

es que somos sobre todo desajuste
desafuero, defasaje, desandar,

escribimos respirando buenos aires
siendo al otro lado la ciudad
.

29.9.10

un gemido gutural
conteniendo el futuro y el pasado
un vómito de aire sale solo
como chiflido de globo desinflándose.

igual que a los 7 en mi cama
dormir con medias, y sin vos
los mueblecitos inflables a los pies
las muñecas todas arruinadas.

sin pelo, sin ropa la barbie
las muñecas lastimadas las muñecas
sin piernas, sin un brazo está
herida de muerte debajo de las manos.

26.9.10


creo que hay gente en algún lado
que por ahí mestá leyendo
pero después me doy cuenta que tan sola
más sola no podía estar.

yo y mis propios regodeos
en miraditas que nada más
mundos flotante, mitológicos
estados dislocados que te vi.

cuando te vi sin que me vieras, en la silla
con los ojos cerrados te miraba
pura loca libre ensimismada
escondiendo y dejando que se vea.

del lado de enfrente se puede estar
en upa, adentro, en argamasa,
tocar la materia sin mover
ni un milímetro uno solo de los dedos.

tensar el aire y obligarte a pensar la buena forma
la fuerza del pensamiento escribe sola cuando estás.

23.9.10

sin palabras para las historias que quisiera, vivir sería más dificil.
me tocaron estas voces que se matan, se enamoran.
dejarlas hablar me cambia el mundo, me lo vuelve habitable,
infinito, ilusorio. si tiene sentido para mí, tiene sentido.

21.9.10

nada es lo que es

ella me pregunta
con 9
por qué hay ºF y ºC.
yo le digo que
la mañía de explicar
las formas de nombrar lo mismo.

y ahí nomás pienso en los metros
los pies
la latitud
y la distancia.

¿es cerca acá a la esquina si no voy?
¿por qué escuchamos esas voces?

si está tan cerca el amazonas
mis entrañas
dentro mio está enraizado
 árbol pino en frío atlántico.

miro esos ojos de 9
que pueden cambiarlo todo
y creo en los extraterrestres
en que nada es porque sí
en que nada es lo que es
ni aún la muerte.

18.9.10

hoy me hizo falta verte
bueno, ayer también
como hace una semana, cada día.

buenos aires sin tango
20 cuadras sin esquinas
hoy te me hiciste vacío, sangría.

17.9.10

Pompeya abajo de las uñas

preguntándome qué quiere decir
hasta las 6 de la mañana
si una vuelta puede significar
algo más que una vueltita.

¿cómo se sabe en el momento si es así?
si de verdad, si de adentro para afuera,
desos sí que mueven el mundo
cambian realidades, y reinventan.

yo tengo un tsunami en las entrañas
y Pompeya abajo de las uñas
soy un Amazonas tupido y caudaloso
soy los Andes uniendo norte y sur.

voy a escribir hasta de nuevo la pangea.
que tendrá otro nombre para que sea el tuyo
la vuelta al estado de masa
la unión de todas las partículas.

16.9.10

andar sin rumbo

hoy me dejé andar sin rumbo
solo la rumba en la sangre como seña
bondi a ningún lado con vos
vos en la cabeza y en el alma.

y me perdí en las calles de mi almagro
de discépolo y lepera melancólicos
no sonaba tu aire fresco en mi país
ni pude ver alguna madreselva.

nada más que ruido y humo espeso
caños de escapes y bocinazos
nada de tu aroma de café
ningún cerro en la febril distancia.

nada que con vos no se haga hermoso
que no quiera mostrarte cuando sea
de viejita, hoy, después de muerta
cuando sea que podamos encontrarnos.

voy a fabricarte un almohadón
voy a juntar plumas y algodones
voy a imaginarte escribiendo cada vez
que vuelva a despertarme respirando.

15.9.10

un día

mariposa por un día
ir por el cielo hasta allá
sin maletas y sin ropa
soplar el aire, flotar.

volar este cielo que,
sin manos te aleja de mí
mar abajo, cordillera
cruzar la frontera, salir
los cables
otros países
mil ciudades y seguir
llegar hasta tu Palmira
exhausta quedarme ahí
aletear cerca tu cara
acariciar tu nariz
besar tu risa con dientes
el tiempo que estemos ahí.

quedarme hasta que acabe el día.
tu día no voy a dormir.

14.9.10

mi alma en una caja va
guardada y llena de etiquetas.
segura, asegurada va
mi alma, para que no se escurra.
como agua en hoja de parra está
mi caja, ques cárcel encerrada.
actua, para discimular
y abajo del escenario estalla.
mi alma ve que los otros la ven 
fabricando amor sin conservantes
y sabe, que nadie imagina qué
mi "sí", no puede, ni respira.
no soy lo que dice mi nombre,
no queda alegría en mis letras,
la risa que ven cuando sonrío
es pura escoria la más pútrida.

antifaz mío es este nombre
y mi sonrisa una mentira virginal.
pura vil falsedad ficticia,
monstruoso espanto atrás desta careta.
puedo actuar la alegría tanto
que hasta me siento creíble con
verosímil, cierta, fiel
viva sin matarme y respirando.
un rato más sin que su sí
ques tan difícil de encontrarlo
unas horas día, más
me quedo acá sola en este espanto.



la velocidad y lo profundo

ir a dos mil, la caja suelta, 
 motor salpicando aceite.
ir las ruedas en el aire con
apenas los pies rozando el suelo.
ir con el viento a favor,
las luces de frente golpe en la cara.
pisar fuerte, acelerar
no temerle al precipicio.
ir sin que importe adonde
ir siempre sin la vuelta pensada.
verle el iris por la lente
deformar  el mundo para verle tanto.
y de golpe cuando estás
a punto del punto, para estarlo
subir la mano, el codo,
poner el freno arrastrando.
todo el cuerpo en un sacudón
rebote al centro el corazón se estaca.
y allí estás, como piedra por siempre
dura como estatua con la fuente en los ojos.

13.9.10

derramándome


la nada misma
es
espacio sin tiempo
fin
después de que no
ni un
cachito de compasión.

un gajo de lulo en
panela con té sin vos
no sabe a nada
ni sé
si volverá a saber algún día.

dónde
tu cáscara y tú 
caminas títere sin cabeza
mirando por el ojo de
algunas caras huecas.

gris mi día y mi casa
más sola que nunca
hoy
mujer derramada en la hornalla
como leche hervida quemándose.

por qué todo tenía que ser tan.

por qué nunca sucede como.

12.9.10

una vaina una emboscada

entiendo perfectamente,
que lo mejor es que no
que mejor que qué
cerca, lejos
es no
el no lugar
de la imaginación
 común
de lo extraño
por qué no
me dice tu voz ques la mía
queriendo imitarte
grillito a la izquerda y la derecha
olvidá
recordá
olvidá
me
mil veces
más
me lo digo
mil
me lo dices
con tus tus
y la puta
me desarmo
desespero
me
la puta que soy se sale de la vaina
se desvaina
se desviste
se
porque mientras se es
se sigue
se está
un rato más al menos
un rato
que me quede
acá

11.9.10

volver

voy al aire
trago espinas
despierta estoy me desvelé
pasó tan pronto todo,
la cornisa,
los párpados de guayaba en el mantel 
anchos como su cordillera crecen
henchidos, como su Palmira del
pesados de tanto perderse en estas tardes
ojos que atraviesan la pared.

voy en el aire
agonizo en mis espinas
la nube sola
el sol que empuja con el pie
los ánimos con sol van para arriba
aún cuando nada queda de él.

y debajo el colchón del amazonas
espejitos de otras aguas sin correr
y de pronto todo es nube y todo es foto,
los tinglados bogotanos,
                                        la pared,
las turbinas que ensordecen la mirada
tiñen todo de esta ausencia de que esté
se desgarran las ruedas en la pista
caucho en el asfalto arándose.

y atrás
marrón y verdes los sembrados
de la tierra, los hermanos del café
atrás el trópico, y la noche en San Antonio
las luces de los flashes y el frapeé
atrás la rumba, el aguardiente
el mango en sal
y yo tragándole con sed
nosotros en la chiva deste valle
del Cauca río vivo sin Gardel
nosotros con los otros y la salsa
mis ojos sin sus cuencas y con él.

10.9.10

vallenatos

la fiebre sola
sin permiso viene
la fiebre prende
apenas me ve.
las manos, su paso
lento va marcando
me lleva a mi ritmo
que no sabe ser.
su giro de acero
se acopla y la vuelta
perfectamente liga
me quiere prender.
me brota del géiser
rubéola en el cuerpo
se infecta la ninfa
perdida después.
se mueven las piernas
del piso a las puntas
cambia el lugar, sume
se desvanece, se.
mi cuerpo se muere
mientras vive solo
más que nunca, grita
tal vez puede ser.
y abajo el colchón
de espeso amazonas
espejitos de otras
aguas sin correr.
y de pronto todo
es nube y es cielo
todo es foto,
mapa,
despegue,
y después.
los tinglados que se achican
cuadraditos en mil verdes
los hangares bogotanos
las montañas
la pared
las turbinas que ensordecen
la mirada que se agota
tiñe todo tinta negra
de esta ausencia del usté.
repentina
mente vuela 
buenos aires va volviendo
se desgarran de las ruedas
en la pista que no es.
que separa
caucho - asfalto
que va arando por el llano
que se eleva y que me lleva
de los granos del café.
del trópico
atrás
de la noche en San Antonio.
de las luces de los flashes
del frapeé.
de la rumba
atrás
aguardiente que me incendia
del mango en sal que asfixia
del trago que trae la sed.
atrás
nosotros en la chiva deste valle
rio vivo deste cauca que encontré.
atrás
ahí donde no estamos
y se olvidan tu Gabriel y mi Gardel.

antes